Navarra ya cuenta con su propia Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), cuyo objetivo es paralizar los desahucios y regular la dación en pago. El colectivo 15-M Pamplona ha impulsado esta iniciativa tras constatar que,
desde que empezó el año, un total de 336 familias han perdido sus viviendas en Navarra, casi dos al día, y suman ya 2.000 desde el inicio de la crisis en 2007. Los miembros de la PAH instaron ayer a todas las entidades privadas a que asuman su responsabilidad en esta crisis y a las instituciones públicas a que colaboren en una solución. Invitan también a toda la ciudadanía, a los movimientos sociales y, sobre todo, a los propios afectados, a "participar en esta búsqueda de soluciones y a parar los efectos más inmediatos e injustos de la burbuja inmobiliaria". El colectivo pretende paralizar o, mejor dicho, retrasar, los desahucios que estén en marcha, y facilitar ayuda legal gratuita a los afectados. Exigen que se cumpla el artículo 25 de la declaración de los Derechos Humanos y el 47 de la Constitución (derecho a una vivienda digna). Al igual que el resto de las PAH impulsadas en diferentes ciudades del país, piden que se regule la dación en pago con carácter retroactivo de manera que la entrega de la vivienda "cancele efectiva y definitivamente la deuda con el banco". Propugnan a su vez un nuevo modelo de sistema financiero e hipotecarios para que no se pueda "especular" con la vivienda ni con otros derechos fundamentales. Asimismo, reivindican la reconversión de viviendas vacías en un parque de alquiler social, "gestionado de manera democrática y transparente".
Entre 43.000 y 66.000 viviendas vacías, de las que una cantidad cada vez mayor están en manos de los bancos. Piden además la implicación de los ayuntamientos con los afectados, como en otras ciudades, activando negociaciones con entidades bancarias e "incluso proporcionando soluciones reales como alquileres muy económicos para que estas familias no se queden en la calle".
