Ésta es una de las preguntas que ocupa últimamente nuestros pensamientos; porque, si somos un país rico, ¿por qué nuestras inversiones en educación y sanidad, nuestros salarios, nuestras ayudas sociales, nuestras pensiones... son las más bajas de la llamada Europa desarrollada? Quizá es que somos país pobre.
Pero si somos país pobre, ¿por qué derrochamos nuestro dinero en gastos de escasa, por no decir nula, rentabilidad económica y social como son el circuito de Los Arcos o el polideportivo Reyno Arena?
Y todavía queremos derrochar más en el dichoso Museo de los Sanfermines y, sobre todo, en el faraónico y ruinoso proyecto del TAV que nos va a dejar enormemente endeudados, o ¿es que, milagrosamente, este gasto no aumenta la deuda pública, excusa con la que nos bajaron las pensiones? Por cierto ¿cuántos kilómetros de TAV se van a construir con lo ahorrado en la congelación de pensiones? Supongo que pocos dado lo costoso de la obra.
Pero es que el TAV no solo es caro en su ejecución, sino también en su mantenimiento; además, no resuelve ningún problema de transporte, sobre todo de cercanías, porque solo une grandes ciudades, ni tiene rentabilidad social; solo podrán usarlo los que tengan dinero para pagar sus caros billetes.
Su coste medioambiental es enorme por la obra en sí (en algunas de las zonas, que ya soportan suficientes infraestructuras, puede ser definitivo) y por el consumo energético que supone su funcionamiento. ¿no querrán utilizarlo para justificar después las centrales nucleares?
Que no nos vengan con la excusa de los puestos de trabajo que crea, porque resultan muy costosos y, la mayoría, son a precario.
Por esto, desde Sasoia creemos que este dinero estaría mejor invertirlo en servicios sociales públicos como sanidad, ayuda a dependientes, residencias geriátricas, pensiones dignas para todos,... Esta inversión sí que crearía muchos puestos de trabajo de calidad y permanentes y sería rentable desde un punto de vista económico y, sobre todo, social.
Sebastián Rosino, presidente de la asociación de jubilados y pensionistas de Navarra