El pasado sábado 5 de octubre, el SAIn realizó un espectacular despliegue para dar a conocer la verdad sobre Inditex. Los viandantes no daban crédito de lo que veían y escuchaban. Todos querían saber más de Inditex.
A las 18 horas comenzaba la acción no violenta frente a una de las tiendas de Zara de la Avenida Carlos III. Una escultura viviente mostraba de forma clara la relación directa que tiene la explotación que sufren y padecen los que cosen para Zara con los consumidores y compradores de la ropa en sus tiendas. El realismo era total al escucharse de fondo el sonido de una máquina de coser que hacía casi inevitable que los ciudadanos no se parasen.
En los alrededores los organizadores habían colocado un Kiosko de la Verdad, donde cada cierto tiempo se proyectaba un documental de la televisioón francesa que analizaba criticamente a esta empresa. Al mismo tiempo, unos repartidores de prensa, vestidos para la ocasión, difundían folletos con noticias y denuncias realizadas a la empresa Inditex con las cabeceras de periódicos locales, nacionales e internacionales. Al grito de "extra, extra,.." captaban la atención de la gente para informarles de lo que no conocían.
Todo el que pasaba por aquella zona acababa hablando de como Iniditex explota niños. Varias personas se interesaron algo más para seguir profundizando en estos temas.
El pasado sábado 5 de octubre, el SAIn realizó un espectacular despliegue para dar a conocer la verdad sobre Inditex. Los viandantes no daban crédito de lo que veían y escuchaban. Todos querían saber más de Inditex.
A las 18 horas comenzaba la acción no violenta frente a una de las tiendas de Zara de la Avenida Carlos III. Una escultura viviente mostraba de forma clara la relación directa que tiene la explotación que sufren y padecen los que cosen para Zara con los consumidores y compradores de la ropa en sus tiendas. El realismo era total al escucharse de fondo el sonido de una máquina de coser que hacía casi inevitable que los ciudadanos no se parasen.
En los alrededores los organizadores habían colocado un Kiosko de la Verdad, donde cada cierto tiempo se proyectaba un documental de la televisioón francesa que analizaba criticamente a esta empresa. Al mismo tiempo, unos repartidores de prensa, vestidos para la ocasión, difundían folletos con noticias y denuncias realizadas a la empresa Inditex con las cabeceras de periódicos locales, nacionales e internacionales. Al grito de "extra, extra,.." captaban la atención de la gente para informarles de lo que no conocían.
Todo el que pasaba por aquella zona acababa hablando de como Iniditex explota niños. Varias personas se interesaron algo más para seguir profundizando en estos temas.