En plena campaña electoral Roberto Jimenez dijo: "No me gustaría ni un pelo tener que pactar con UPN". Hoy esta imagen vale más que mil palabras. El PSN entra en el gobierno con tres consejeros y Roberto Jimenez siendo vicepresidente. Está claro que en el sillón y la poltrona se está más cómodo. Luego nos dirá que su objetivo es la transparencia, ¿para que?, para confirmar lo que ya sabemos que van a la política a servirse del pueblo y no a servir al pueblo.